El Reducto Sónico es una asociación cultural que nace en marzo de 2006 con una única idea en mente: organizar conciertos de rock, en todas sus variantes, que de otra manera no podríamos disfrutar en nuestra ciudad.
Los objetivos principales de la asociación son, por un lado, promover el panorama musical vallisoletano y por otro lado, situar a Valladolid dentro de la escena rock alternativa.
Lunes 8 de octubre de 2012. Sala porta Caeli, Valladolid.
21.30 H
anticipada: 10 € // taquilla: 10 €
puntos de venta: bar fuzztone, Morgan cafe,
Las Ardillas y Shannon & The Clams, dos de las bandas más en boga del
garaje ignoto del panorama actual, harán un alto el próximo 8 de octubre en la
Porta Caeli de Valladolid presentado por REDUCTO SONICO con motivo de su gira
europea conjunta.
Shannon & The Clams es el trío protagonizado
por la frontwoman Shannon Shaw, bajista del conjunto californiano Hunx and His
Punx. Su cálida voz y sus dotes a la hora de componer las letras de su grupo
matriz le brindaron la oportunidad de crear su propio conjunto, paralelo a su
colaboración con el peluquero "gayer" . El año pasado Shannon &
The Clams editaron su segundo disco Sleep Talk (2011. 1-2-3-4 Go!), el cual
estarán presentando en Porta Caeli
Por su parte, la banda puertorriqueña de garage punk Las
Ardillas se deciden a cruzar el charco tras su éxito cosechado en
Estados Unidos con su debut homónimo. La puesta en escena de Gianky, vocalista
de la joven formación, no deja indiferente a nadie entre el público. Las risas,
el sudor y la sensación de salir con las zapatillas abrasadas están aseguradas
con temas como Algún Día, Nancy y Todo Es Mierda
John Paul Keith es un brillante guitarrista y cantante; de
ese tipo de compositores que crean grandes melodías sin apenas esfuerzo. Su nuevo álbum "The Man That
Time Forgot" está editado en Big Legal Mess a través de Fat Possum
Records. Producido por Bruce Watson de Fat Possum, captura el espíritu y
la energía de los directos de Keith y su banda The One Four Fives, pero explora
un amplio abanico de temas e influencias que van desde el Tex-Mex, el garage
rock, el countrypolitran, el soul/pop de mediados de los 60's, el rockabilly, e
incluso el jazz-blues de Mose Allison. Es a la tercera escucha cuando todo se
ve claro: Estas canciones son increíbles. Desde el inicio con "Never Could
Say No", hasta el irónico vals que cierra el disco, "The Last Last
Call", este es el trabajo de un
enorme compositor.
John Paul Keith, hijo de un camionero, se crió a las afueras
de Knoxville. Aprendió a cantar en la iglesia y a tocar la guitarra a los diez
años cuando su padre le regaló una acústica y un par de discos: un golden hits
de Chuck Berry y los mejores éxitos de B.B. King. Esa fue la primera vez que escuchó música que
no fuera country. A The Beatles los descubrió siendo ya de adolescente. Con
diecisiete años ya llenaba salas en Knoxville con The Viceroys, pero dejó la
banda porque no le gustaba la dirección que estaba tomando su música. A los
veintiuno se mudó a Nashville, montó su propia banda, y firmó con una
multinacional en cuestión de meses. Se trataba del meteórico ascenso del chico
en el que toda la industria musical había puesto sus ojos, y también quería
poner su anzuelo.
John Paul Keith puede resumir todo lo demás en tan sólo unas
lineas. Te cuenta casi todo lo que necesitas saber sobre él durante los 30
primeros segundos de "Spills and Thrills", su espontáneo debut de
2009, con temas tan atemporales y elaborados que jurarías que son caras B de
los 50's o 6o's. Sobre una rítmica batería y una punzante Telecaster, Keith canta "En fin, soy preciso, pero nunca
a tiempo / Un paso adelante, dos pasos
atrás / Nunca he tenido suerte, y nunca
he ido a la moda / Muchos dolores de cabeza cuando abría la boca."
Bendecido y condenado con un excepcional talento y una muy común tozudez
sureña, Keith habría llegado mucho más lejos en la industria musical si hubiera
tenido un poco menos de cerebro y bastante menos integridad.
Después de años de frustrantes peregrinaciones, Keith se
mudó a Memphis y se dió por vencido.
Pero Memphis no es el lugar más adecuado al que ir si lo que quieres es dejar
la música. Finalmente, se volvió a enamorar de la guitarra y pronto empezó a
frecuentar Taylor's Music, donde conoció al baterista John Argroves y al
bajista Mark E. Stuart. La recién formada banda decidió tocar algunas versiones
en un garito local, y en poco tiempo ya se había unido a la banda el organista
y pianista Al Gamble. Tomando su nombre de la progresión de acordes I-IV-V que
forman los cimientos del blues y el rock'n'roll, los recién llamados One Four
Fives le dieron a Keith algo que no había logrado durante todos estos años: U
grupo de músicos receptivos que lo igualaban en talento y en integridad. John
Paul Keith and The One Four Fives se convirtieron en la banda más feroz de
Memphis. Fue en esa ciudad, Memphis, donde Keith empezó a escribir las mejores
canciones de su vida.
Además del lanzamiento de "Spills And Thrills",
Keith continuó con la gira por los
Estados Unidos como telonero de la banda de Memphis, Lucero, y más tarde por
Europa con la leyenda del garage-punk, Jack Oblivian. 2009 y 2010 mantuvieron a
The One Four Fives muy ocupados en Memphis, editando el CD Live At The Hi-Tone
y otros dos 7". La historia continúa en 2011 con "The Man That Time
Forgot", el segundo álbum de Keith
para Big Legal Mess Records y en 2012 dando el salto a Europa.
Se acaba el año y es tiempo de
hacer listas de discos favoritos. Personalmente no compro demasiadas novedades
y tiro más de reediciones (¡fantásticas las de Chuck Berry,Buddy Holly,Mudhoney,DamnedoBeasts
of Bourbon!) y abundante material usado. Aún así siempre caen algunas
novedades; son pocas pero intensas, y de elegir un disco del año sería sin duda
el debut deJohn Paul Keith
and The One Four Fives,“Spills
and thrills”, ya no por la originalidad de la propuesta, ni por su actitud
enrollada, sino por lo contrario, al pinchar el disco la magia se repite una y
otra vez, el mismo cosquilleo que se siente al escuchar un gran disco, algo así
como asistir a una fiesta conChuck
Berry,Booker T,Gram Parsons,Dave EdmundsoJohn
Lee Hookercomo invitados
especiales.
Haciendo un poco de historia,John Paul Keithcreció en Knoxville, Tennessee al
ritmo de viejos LP’s deChuck
Berry,Jerry Lee LewisoDoug
Sham. En 1994 formó parte de losV-Roys,
un grupo de country-rock protegido por el mismísimoSteve Earle. En 1997 John Paul
se mueve a Nashville para formarThe
Nevers, otra banda que obtiene muy buenas críticas. En 1999 The Nevers se
separan y Keith forma junto aRyan
Adams,The Pink Hearts,
uno de los múltiples proyectos paralelos del niño terrible Adams. En el 2001 se
une aStatesidegrabando dos álbumes, de nuevo con
excelentes críticas. En el 2005 John Paul deja Stateside y emprende una nueva
aventura, se mueve a Memphis, o lo que es lo mismo, una de las cunas del
primigenio Rock and Roll, pero también hogar de clásicos modernos comoJack Yarber(Oblivians) oHarlan T. Bobo, con los que
toca a menudo por los garitos de la ciudad.
Curiosamente, a pesar de que
Keith tiene una trayectoria musical de vértigo, no es hasta este 2009 cuando se
decide a publicar su primer disco en solitario con la ayuda de The One Four
Fives, o lo que es igual, una de las secciones rítmicas más prestigiosas de la
ciudad, con todos sus miembros curtidos en mil batallas.“Spills and Thrills”es como se llama el disco, y dentro de
su carpeta a lunares negros y azules, con John Paul Keith y su flamanteTelecasteren primer plano, se esconde
tímidamente un trozo de plástico negro circular, un objeto inanimado que cobra
vida propia al pincharlo en el tocadiscos, y te atrapa a la primera escucha.
John Paul es un encantador y entusiasta del Rock and Roll, que hace realidad
aquello que decíaLou
Reeden 1970 (“A pesar de
todas las amputaciones podías bailar con una emisora de Rock and Roll”). No
inventa nada nuevo, ni lo pretende, pero tiene el don de apropiarse de estilos
clásicos como Rhythm and Blues, Country, Soul, Pop y lo que se le ponga por
delante. El disco está grabado en directo en el estudio, como debe ser, y aunque
suena con fuerza no te taladra los tímpanos. El mágico esquema de dos
guitarras, bajo, batería y órgano se repite, pero también incorpora algún
precioso arreglo de Pedal Steel en los temas más country.
Las doce canciones de“Spills and Thrills”no tienen desperdicio. Suena“Lookin’ for a thrill”y sin dudaDave EdmundsyNick
Lowete guiñarían el ojo
puesto en el pop de toda la vida.“Pure
cane Sugar”es un nervioso
Rock and Roll donde riffs de guitarra juguetean con un piano escuelaJerry Lee Lewis.“Secondhand heart”resucita el
espíritu de laSun Recordscon ese aire entre Country y Doo Wop.“She’ll
dance to anything”esta hecha
para bailar hasta que salga el sol y tus tobillos no aguanten más; me encanta
ese beat de batería con cierto toque latino que trae a la memoria la clásica“Watch your step”, y enorme el
solo que se marca John Paul. En“Cookie
bones”la banda no disimula
su admiración haciaBooker T.
and the MGs, que como no podía ser de otra forma, el teclistaAl Gamblese lleva el gato al agua, y para
cerrar la primera cara del disco,“Let’s
get gone”es un Boogie que
levantaría al mismoJohn Lee
Hookerde la tumba.
Al dar la vuelta a“Spills and Thrills”uno se pregunta si el nivel se
mantendrá. Las dudas se disipan cuando suena“Smoke
in a bottle”que
inmediatamente trae a la cabeza a los primerosFlamin’ Groovies, aquellos que
nos hicieron vibrar con el maravilloso“Supersnazz”.
Más pedal Steel y más country con“Otherwise”,
toda una delicia interpretada a la manera del sonido Nashville con una fuerte
sensibilidad pop que es bienvenida. Los corazones rotos también están invitados
a esta fiesta, y a continuación suena una preciosa balada llamada“Rock and Roll break your heart”que literalmente pone los pelos de
punta.“If i were you”es lo más enérgico del lote, puro Pop,
puroReigning Sound, puro
beat, puro optimismo; sencillamente una canción perfecta. Suena el rasgueo de
una guitarra, canta John Paul y al poco entra toda la banda en su plenitud con“Too hip”, un gran tema Rhythm
and Blues hecho para bailar, beber y amar sin importar el orden. Esto se acaba,
pero todavía no te quites los “zapatos de gamuza azul” y déjate llevar por ese“Doin’ the devil’s work”que renueva el lado más festivo del
Rock and Roll, que nunca debería perder.
Después de este gran trabajo,
solo pido un deseo a los reyes magos, encabezados porChuck Berry: QueJohn Paul Keithy el resto de la banda se dejen caer
por tierras españolas.
John Paul Keith, "The man that
time forgot"
John Paul Keithno es nuevoen
este blog. Hace un par de años pasó por aquí su majestuoso y pletórico debut,“Spills and Thrills”, y a día
de hoy, por lo menos en mi caso, es un disco que aún no se ha “quemado” y suena
tan refrescante y disfrutable como el primer día. Dos años después el bueno de
John Paul vuelve a la carga con otra colección de canciones directas,
sencillas, pero hechas con gran amor. Un amor por elRock and Rollque se mantiene insobornable y
enciende la mecha de una tradición que uneRhythm
and Blues,Swing,Garage,Country,SouloPop.
Su nuevo trabajo se llama“The man that time forgot”, y en poco más de
treinta minutos John Paul Keith se merienda un gran pedazo de pastel de música
americana con una colección de canciones propias, tan jugosas como la tradición
musical que revive.
John Paul Keith tras una amplia
experiencia musical a mediados de los 90 en suKnoxvillenatal, posteriormente cambia su
residencia aMemphis,
Tennesse, donde por lo visto está a punto de abandonar la música, pero
afortunadamente, la efervescencia musical local favorece la empatía con gente
comoJack OblivianoHarlan T Bobo, y es cuestión de
poco tiempo que nuestro protagonista coja la guitarra de nuevo y forme su
propia banda. Afortunados nuestros oídos por tan acertada decisión.
“The man that time
forgot”nos
trae al tiempo presente gloriosas épocas pasadas de Rock and Roll, cuando
realmente era una música popular, abierta, extravertida, un gran rito de
diálogo natural con el público, mediante solicitud-respuesta, mucho antes de
que el artista se ahogara en su propio endiosamiento. Pero sobre todo“The man that time forgot”crea un hilo de conexión basado en el
ritmo, como antes lo hizoFats
Domino,Bo DiddleyoHank Williams, pero tampoco se
limita a copiar los patrones originales de manera idéntica. John Paul Keith
tiene su cancionero propio, y os aseguro que es una fuente inagotable de bienestar,
son temazos como la copa de un pino que no están al alcance de muchos.
Si me preguntaran que disco es
mejor, si“Spills and Thrills”o este último, no me mojaría, ambos
son impresionantes, y como en su día hice polvo mi copia de“Spills and Thrills”ahora le toca sufrir lo suyo a“The man that time forgot”, y
de momento me resulta imposible librarme de esas canciones. Adoro el tema que
da título al álbum por su sencillez y ternura,“Never could say no”te espabila con unas palmas de lo más
festivas,“Anyone can do it”es puroBobby Fuller, el puente
perfecto entreBuddy Hollyy laBritish
Invasionen los 60.“Afraid to look”engrasa el corazón con el nervio de la
música de Garage.“Somebody
ought to write a song about you”es
una delicatessen Soul que te lleva de la mano por los estudiosArdenten Memphis en los 60 y 70,“Dry county”es unRockabillyque seguro hace las delicias de los
fans deHi-Risers.“Bad
luck baby”apunta al inmortal
Buddy Holly pero con la perspectiva de la New Wave de un eleganteElvis Costello, y para coger
carrerilla“I work at night”flirtea con elSwingmás dinámico donde el órgano juguetón
sustituye a la sección de metales. Pero que mejor que cerrar el disco con un
sentido y melancólico Countrycomo
es“The last last call”,
en fin, que cada uno de los temas por una u otra razón es recibido con una
enorme sonrisa, y este disco debería ser de obligada escucha para las gentes de
bien y de mal vivir.
Desde Melbourne (Australia) llegan
The Bowers (antes The Bowerbirds, nombre que dejaron porque es usado por una
banda estadounidense de folk) . De rock garajero a pop entre guitarrero y
melódico , pasando por psicodelia con un resultado global realmente notable.Si
a ello le añadimos que figuran excomponentes de Rocket Science, You Am I y The
City Lights, ya tenemos un pedazo de grupo.
Han tocado con bandas como The
Soundtrack Of Our Lives, The New Christs, You am I, Johnny Casino o Hoss
demostrando que son una potente banda que sabe conjugar las melodías pop con la
potencia de las guitarras. Calidad no les falta.Y sus conciertos son
explosivos!!
Gionfriddo ya hizo un tour por
Europa en 2005 con Spencer P. Jones (Beasts of Bourbon), y Kit Warhurst giró
con Rocket Science tocando con The Dirtbombs, The Darkness y Supergrass.
Una oportunidad única de ver a una
de las mejores bandas de Australia.
Se hacen llamar The Down Down Downs y lo único que les une es la pasión por el Pub Rock. Doctor Feelgood, Rockpile, Eddie & The Hot Rods, Graham Parker o Mickey Jupp son sus ídolos y deciden recrear sus mejores aventuras encima del escenario. Ritmo, Blues y cerveza parecen ser los únicos intereses en la vida de estos elementos.
Los antecedentes de los sujetos en cuestión son amplios a la hora de prepararla por ahí, pero el tiempo no los ha hecho precisamente más sabios y sí más salvajes a la hora de repartir acerados guitarrazos del rock'n'roll más primigenio.
Urban von Ripper (Harla Horror, Screamin' Witch Doctors, Lagartos Torraos): Voces y palmas.
Cocolo (Protones, Insanity Wave): Guitarras y pasos de baile.
JuanAn (NoWonder, Crazy Mandingos, Thee Suckin' Dicks): Guitarras y gritos.
Manolo Válvulas (Válvulas, Esteban Light, Romeo 13...) Bajo y sentido común.
Ignacio Cartón (Bummer, Micromachines, We Are Balboa, Esteban Light) Batería y risa floja.
The Screamin' Targets es un grupo de power pop-rock´n´roll formado a mediados de 2010 por Arturo Ibañez (NCC) a la guitarra, Arturo Zumalable (NCC) a la batería, Beñat Bergara (Lili and the Tomboys) al bajo, y Gigi Peligro (ex-Supertrooper) a la voz y a la guitarra. La banda comienza su andadura por los escenarios es...te año aunque ya empezó a fraguarse tiempo atrás en el momento en que Arturo Ibañez y Gigi Peligro comienzan a componer temas añorando el sabor más clásico del rock´n´roll y el power pop heredero de grupos como los Flaming Groovies, Plimsouls, Nerves, Buel Angel, Rockpile.... Tras la llegada de Arturo Z. y Beñat, Screamin' Targets toma forma definitivamente y se lanza a la carretera con su directo pub rock 100% bailable y sin compromisos. Tras una primera maqueta en formato cassette, el vinilo llega a la banda. Screamin' Targets lanza su primer single el 23 de septiembre de 2011 con Ghost Highway Recordings: Un 10" compuesto por 8 pildorazos de rock'n'roll con corazón de power pop. Música para escuchar con una cerveza en la mano.
Reducto Sonico tiene el placer de presentar en DIRECTO
desde NEW YORK a los insuperables REYES del GARAGE-ROCK!!!...
THE FLESHTONES
Jueves 16 Febrero 2012 20:00h.
Sala Black Pearl (C/ Macias Picavea 7 "zona Cantarranas")
Entradas 10€ anticipada (Fuzztone y Bar Morgan) 12€ Taquilla
The Fleshtones es una de las mejores bandas de garage de
todos los tiempos, liderada por el carismático Peter Zaremba, en activo desde
hace más de 30 años y en plena forma. The Fleshtones aseguran siempre diversión
y rock&roll en sus frenéticos conciertos.
Formados en Nueva York por Keith Streng y Jan-Marek
Pakulski, dos compañeros de habitación que descubrieron que un inquilino
anterior había dejado algunos instrumentos en el sótano de la casa que
alquilaban. A Streng, a la guitarra, y Pakulski, en el bajo, pronto se les unió
Peter Zaremba en la armónica, teclados y voz y Lenny Calderón en la batería.
The Fleshtones debutaron en el CBGB's el 19 de mayo de
1976. Debido a que no encajaban en el sonido que buscaban las discográficas de
la época, no sacaron su primer disco hasta 1982, ‘Roman Gods’, todo un CLASICO
con mayúsculas a día de hoy y un precursor del revival de Garage que se viviría
unos años más tarde en USA y luego en el resto del planeta.
Compartieron local de ensayo con The Cramps en el Bowery
en 1977. Al año siguiente, The Fleshtones firman con Red Star Records (sello
que incluía a luminarias como Suicide o los Real Kids, entre otros artistas),
grabaron su primer álbum, y con el cineasta/artista Henry M. Jones produjeron
Soul City, una animación de vídeo compuesto de recortes pintados a mano. El
primer sencillo de la banda, “Beat América” fue lanzado en 1979 (re-grabada en
1984 como parte de la banda sonora de la película Bachelor Party). A partir de
ahí se convierten sin duda en una de las bandas más influyentes del sonido
Garage y sus conciertos destacan por encima de los demás compañeros de
generación.
The Fleshtones han girado y grabado constantemente
añadiendo a la mezcla toques de r&b, rockabilly y surf. En 2011, The
Fleshtones unieron fuerzas con Lenny Kaye (Patti Smith Group) y editaron
“Brooklyn Sound Solution” (Yep Rock Records), al tiempo que veía la luz el
documental “Pardon Us For Living, But The Graveyard Is Full’‘ en el que se
retrataba su historia a lo largo de una veintena larga de discos y tres décadas
de savoir-faire. ¡Esta será una de esas noches de rock, baile y diversión para
recordar!
El
concierto de the fleshtones no va a tener lugar en la sala Bagur como se había
anunciado (por causas ajenas a ala organización).Estamos mirando otras salas
donde sea posible celebrar dicho concierto. estad atentos seguiremos informando.
Presentamos una de las primeras giras del
año, y nos orgullecemos que sean nada más y nada menos que los locos del motor
de Eindhoven, PETER PAN SPEEDROCK. Para todo el tronao del rock n roll que le
guste la caña al más puro estilo ZEKE, MOTÖRHEAD, GLUECIFER o PUFFBALL, PETER
PAN SPEEDROCK son la respuesta holandesa a todos los headbangers que quieren
amplis al 11, batería a ritmo frenético, una voz destructora, y letras sobre
sangre, alcohol, mujeres, fiesta, conducir a 180, insultar a la madera, y sobre
un infierno que se nos está quedando pequeño. Después de haber compartido escenario con
Motörhead, Nasville Pussy, o Turbonegro, compartir disco con Danko Jones,
Gluecifer o Zeke, tener un catálogo imponente con más de 20 publicaciones, o
haberse pateado varias veces Europa y Estados Unidos y no haber muerto en el
intento, PPSR ya tiene una buena legión de fans por medio mundo.